Disminuyen los católicos en América Latina
Aguascalientes, Abril 28 (2014).- El 27 de abril, el Vaticano canonizó a los Papas Juan Pablo II y Juan XXIII. Este acontecimiento coincide además, con el primer año del Papa Francisco al frente de la iglesia católica. La fecha nos parece importante para retomar los datos publicados por el Latinobarómetro, el pasado 16 de abril de 2014, que abordan el tema de los cambios religiosos que se están gestando en América Latina.
El estudio fue realizado en dieciocho países (Paraguay, Ecuador, México, Venezuela, Argentina, Perú, Bolivia, Colombia, Panamá, Rep. Dominicana, Brasil, Costa Rica, Chile, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Uruguay) y un primer dato que llama la atención, es que de acuerdo con la serie histórica, existe un considerable descenso en el porcentaje de ciudadanos que se auto identifican como católicos en la región.
En 1995, el 80 % de los entrevistados en América Latina dijo que su religión era la católica, el año pasado el porcentaje que así se definió llegó a 67 %. Es decir, en 18 años, el porcentaje delas personas que se identificaban como católicos disminuyó 13 puntos.Debemos señalar que el estudio hace aclaraciones puntuales sobre las posibles causas que explican estos datos, las cuales son muy diferentes en cada país.
Nicaragua, Honduras, Costa Rica y Uruguay son los cuatro países que tienen más puntos de diferencia en la auto identificación de católicos entre 1995 y 2013. El 77 % de los entrevistados en Nicaragua en 1995, se declaraba católicos, para 2013 solo 47 % dijo tener esa religión. Hubo un descenso de 30 puntos en 18 años, siendo este el país que registró más variación.
En tanto, Honduras pasó de 76 % de ciudadanos que se declaraban como católicos a 47 % en el mismo lapso de tiempo. Por otra parte el reporte indica que, México y República Dominicana son los únicos países de los dieciocho que contempla el estudio, que no presentan, entre 1995 y 2013, porcentajes menores de ciudadanos que se auto identifiquen como católicos. Debemos señalar que el dato para el caso de México puede ser cuestionado, ya que de acuerdo con datos proporcionados por Inegi y otros del Instituto Mexicano de Doctrina Social Cristiana (IMDOSOC) sí existe un descenso en el tiempo de los ciudadanos mexicanos que se declaran católicos.
La tabla inferior indica que los niveles de catolicismo en América Latina son diversos. Mientras que en Paraguay y Ecuador más del 80 % de los entrevistados dijeron ser católicos en 2013, en Nicaragua, Honduras, Guatemala y Uruguay el porcentaje registrado de católicos fue inferior al 50 %.
Con los porcentajes registrados el año pasado, podemos observar que en doce países latinoamericanos la religión católica es dominante, esto quiere decir que más de 60 % de los entrevistados se autodefinió como católico. En dos más (Chile y El Salvador) la religión católica es mediadamente dominante, con porcentaje de autodefinición con esta religión de entre 50 % y 60 %. En cambio, en Guatemala, Honduras, Nicaragua y Panamá aquellos que se definieron como católicos representan menos del 50 % de los ciudadanos.
El reporte realizado por el Latinobarómetro de acuerdo con Parametria, hace hincapié en que, la reducción de personas que se identifican como católicas en América Latina no se trata necesariamente de un proceso de secularización de los ciudadanos en la región, el fenómeno tiene que ver más con un proceso de transición de los individuos a otras religiones. Mientras que el nivel de católicos disminuye, aumenta el número de personas que se declaran evangélicos, aunque no se puede asegurar que se trate de las mismas personas.
Honduras y Nicaragua, son un claro ejemplo de este fenómeno. En 1995 en Honduras, la diferencia entre católicos y protestantes era de 64 puntos, para el año 2013, la misma llegó apenas a seis puntos. En Uruguay, en 2013, la diferencia entre católicos y protestantes fue de apenas 3 puntos.
México es uno de los países, en los que de acuerdo con el informe, la religión católica sigue siendo dominante. En 1995, el 77 % de entrevistados se declaró católico y para 1999 el porcentaje llegó a 89 %. Los niveles más bajos de auto identificación con dicha religión se observa que ocurrieron en 1997, 2000, 2002 y 2005, aunque los porcentajes nunca fueron menores a 70 %.
Empero, datos proporcionados por el Inegi, que pertenecen a los censos de población que realiza cada diez años el organismo, muestran que en México de 1895 a 2010 hubo un descenso de 15 puntos en los mexicanos que se auto identificaron como católicos. Del año 2000 al 2010 la población católica pasó de 88 % a 83.9 %. En 2010, la población que dijo tener una religión distinta a la católica alcanzó la cifra de 10 %, en tanto que en 1970 era tan sólo de 2.2 por ciento.
La confianza que tienen los mexicanos en la iglesia católica y en los sacerdotes también se ha modificado con el tiempo. La serie histórica de encuestas en vivienda realizadas por Parametría, refieren que el porcentaje de confianza que los mexicanos tienen en la iglesia católica pasó de 78 % en el 2002 a 63 % este año. El nivel de desconfianza que tienen los entrevistados en dicha institución es el mayor registrado desde que iniciamos la serie hace doce años (37 %). Cabe recordar que México fue uno de los países donde se dieron a conocer casos de abuso sexual cometidos por miembros de la Iglesia católica, tal es el caso de Marcial Maciel, fundador de la Legión de Cristo en 1997.
En cuanto a la confianza en sacerdotes, vemos que ésta se ha erosionado aún más que la confianza en la iglesia católica. La mitad de los entrevistados dice tener “mucha” o “algo” de confianza en los clérigos, mientras que la otra mitad manifiesta tener “nada” o “poca” confianza en estas figuras, cuando en 2002 la confianza de la población era superior al 60 %.
La religión es un fenómeno que incluye creer, actuar y pertenecer (Layman 2001) y es en este sentido que es importante para la opinión pública identificar los posibles cambios en el tema. América Latina no presenta el fenómeno que se vive en algunos países europeos, donde el desarrollo económico está fuertemente relacionado con la secularización, si bien se observa un cambio en el número de ciudadanos que se identifican como católicos crece el número de personas que adoptan otra religión. Los datos sobre México consideramos que pueden ser contrastados con los otorgados por otros organismos como Inegi quieren realizan mediciones puntuales en el tema.